Pues no fue en la noche del sábado al domingo cuando nevó, sino en la del domingo al lunes. Una vez más los pronósticos fallaron y se demostró que la meteorología es una ciencia bastante inexacta. Nada como los más viejos del lugar o ese hueso roto hace años. Esos sí que no fallan nunca.
Mañana de lunes ventosa y fría. Al menos soleada, eso sí, que es lo único que ha invitado a calzarse las zapatillas y hacer el entrenamiento. Hoy sí que es conveniente para el que pueda buscar la luz y el poco calor del sol porque no quiero pensar el frío que tiene que hacer a partir de las 7 de la tarde.
Hay restos de la nevada en las umbrías y al lado de una de ellas he hecho unas cuestecitas en las que he primado el ciclo anterior frente a la velocidad para coger algo de fuerza. La cintilla iliotibial derecha me ha dado guerra pero como os he ido comentando estoy tan harto de dolores, enfermedades y lesiones que he optado por el camina o revienta.
En algunos pasos de las subidas la pierna achacosa ha fallado y he dado un traspiés pero no ha ido a mayores la cosa. También es verdad que según iba avanzando el entrenamiento la molestia iba a menos. Claro síntoma, por tanto, de tendinitis aunque tampoco me cuadra porque no es que haya metido mucho volumen en los últimos meses, así que tendinitis de qué.
En fin, a seguir remando que es la única manera de llegar a buen puerto.
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